O por lo menos eso es lo que me ha dicho el psiquiatra al verme hoy.
Físicamente estoy mejor (jajaja) iba preparada para que no me enviara al psicólogo y mentalmente también, al menos en esta ocasión he podido hablar con él sin llorar. Todo un logro por mi parte. Cada vez que iba, en cuanto entraba por la puerta de la hora que estamos juntos, creo que 45 minutos yo lloraba mientras el tomaba notas (me encantaría saber que escribe de mi) y los 15 restantes hablabamos.
Pero hoy no. Hoy en poco más de media hora estaba "lista".
Así que hemos podido hablar con toda la tranquilidad del mundo y me ha confirmado que lo que me pasó en el aeropuerto tanto a la ida como a la vuelta, era normal y que me seguirá pasando. No se puede evitar. He de pasarlo y punto. Tengo que enfrentarme a mis "miedos" y tengo que dar la cara. Nada de esconderme ni evitar según que cosas. No me he de esconder de nada ni de nadie. No soy culpable. Mi situación era la normal. Yo no hice nada prohibido.
Si, para los que no lo sepáis a la vuelta de Granada me pasó lo mismo que a la ida. Así que tal y como desembarqué, hice dos llamadas de auxilio que no hicieron que dejara de llorar y una tercera que no recordaba y que nunca falla. Lástima no acordarme de el cuando fui a Granada. Tiene un método infalible. Es llamarlo y empezar a oírme llorar y entonces...zas, me recuerda lo estúpida e "imbécila" que soy y dejo de llorar de golpe. Si, no falla nunca. Si quiero dejar de llorar, sólo tengo que llamarlo y en cinco minutos de bronca se me corta el llanto de golpe.
Así que cuando baje del bus, ya me había calmado y volvía a sentirme fuerte e invencible. Bueno, hasta la próxima vez que habrá más de una en la que vuelva a hundirme.
El resto sigue igual. Lo único el horario de la medicación que me lo ha cambiado a ver si consigue que duerma. Eso si que lo llevo mal, aunque cada vez más acostumbrada a mis noches de insomnio.
Lo bueno, es que vuelvo a tener concentración y estoy leyendo una barbaridad.
Desde que empecé las "vacaciones" el 1 de julio, llevo leídos casi 5 libros. Los devoro durante la noche.
Me encanta volver a retomar el hábito de leer y lo mejor es poder hacerlo en el silencio de la noche.
Mi café con leche, mi donut, mi libro y como no...mi aire acondicionado. Si es que no se puede pedir más. Bueno si, podría pedir dormir que es lo que toca pero....ya llegará algún día.
Demasiada ansiedad, demasiados nervios, demasiados pensamientos, demasiados...sentimientos.
En fin, para los que no lo sabeis, mañana (hoy 28 de julio) es el cumple de mi "leona". Cumple 10 años (doble dígito, verdad Cati?) jajaja.
Un besazo a tod@s. Voy a leer un rato.
Mañana...más.
Cumpleaños en la playa!
Hace 13 años
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